La butaca de Paca & Paco

Visto lo cual, parecen evidentes las semejanzas del entorno en que se desarrolla, no solo la introducción de la película, sino todo el contexto histórico, cultural, social y en general bien podríamos decir que aquél niño del mercado al que el Rey decidió acoger en el seno de su familia haciéndolo príncipe de Persia y permitiéndole vivir las aventuras que narra la película, podría haber sido Aladdin.

Y esque, si nos fijamos, en sus orígenes apenas hay diferencias. ¡Pero si hasta le pillan robando manzanas en el mercado igual que el personaje original de Disney! En fin. Con esto no quiero decir que haya plagio. Desde luego que no.

Pues el Príncipe de Persia, como personaje autónomo (entendedme, sin una película que lo avale detrás) nació años antes que el “Aladdin de Disney” (que no antes que la leyenda popular de “Aladino” que recogían las historias de las “Mil y una noches” allá por el año 800 d.C.).

En cualquier caso, el Príncipe de Persia, inspirado o no en los cuentos árabes (eso ya no lo sé), se consolidó como todo un personaje, por méritos propios, con la creación en 1987 por Jordan Mechner de una saga de videojuegos de aventuras del género de plataformas con el mismo nombre (Prince of Persia). Su éxito se debió a la increíble fluidez de animación lograda en el protagonista, nunca vista hasta entonces.

La película hoy en cines, se llama El príncipe de Persia: Las arenas del tiempo (Prince of Persia: The sands of time) cuya historia tomó como base la primera de la Tetralogía de viedeojuegos :Las Arenas del Tiempo (del Príncipe de Persia) lanzado por Ubisoft en 2003. No obstante, el argumento no es exactamente el mismo, pues Jordan Mechner creador del videojuego y escritor del guión de la película alteró algunos rasgos de la historia original, a pesar de que en un principio la idea era mantenerse fieles al videojuego. Sea como fuere, la idea pareció gustar a la factoría Disney que invirtió lo que hizo falta para producirla.

Datos históricos a parte, la película no está mal. Es verdad que no es una obra imprescindible, pero se deja ver. Yo la definiría como entretenida, nada más. Aburrirme, no me aburrí, pero supongo que el cachas de Persia, digo el Príncipe de cachas, digo el Príncipe de Persia colaboró en gran medida a ello.

No hay grandes actuaciones, aunque el reparto no está mal. También éste filme nos deja caras conocidas como Jake Gyllenhaal (el que sigue vivo de los dos de Brokeback Mountain), Gemma Arterton (chica guapa de Furia de Titanes), Ben Kingsley (el médico “majo” de Shutter Island), Alfred Molina ( el Dr. Otto Octavius de Spiderman II)… entre otros.

Grandes planos hay pocos ,pero los dos o tres buenos que hay son espectaculares (véase momento al inicio en el que el protagonista salta desde una de las torres de la ciudad que ocupan, él solo con una cuerda) así que la fotografía psé… aún a pesar de que la mayoría está hecha con la técnica de los videojuegos. Los efectos no son muchos, pero los que hay (el rollo daga-me-transporto-en-el-tiempo no está mal) molan. Lo que más destaca sin duda son las secuencias de acción y sobre todo los saltos entre los tejados.

Una de las cosas que me llamaron la atención es que igual los decorados no estaban muy currados. Vamos, los exteriores sí, pero si os fijáis en el castillo del principio, mientras lo atacan (la fortaleza en general) parece más un parador que el interior de una ciudad Persa de aquélla época. (Le pasa como los decorados de Águila Roja, que no acaban de ser creíbles. ¿Un niño con gafas de montura fina en la Edad Media? ¿Donde se ha visto eso?)

Poco más puedo decir. Entretenida, sí. Alucinante… psé… más bien no. Aclarar a los que aún estáis a tiempo, que la recomiendo ver en la gran pantalla. Pues ésto visto en la tele… nose yo.

El joven príncipe adoptado Dastan es un valiente guerrero, respetuoso con su padre adoptivo y sus hermanastros, pero una traición por un objeto místico, hará que tenga que demostrar su lealtad y todos los valores que aprendió durante su vida. Trailer aquí.

Paca